(Rockum)-Después de muchos años de espera, para este su humilde latino metalero servidor, se cumplió mi deseo de ver en vivo a Children of Bodom, banda finlandesa que ya vienen en esta metálica carretera por más de 26 años.

Bueno, como algunos sabrán, yo vivo en la histórica ciudad de Kingston en Ontario - Canadá, y estoy a casi 3 horas del moderno Toronto, la cuidad del futuro para muchos, en donde se presentaban estos finlandeses con su gira norteamericana que los llevara a 29 ciudades entre dos países como Canadá y Estados unidos.

Todo comenzó luego de una fría espera en una cola larga y que casi no se movía pues a pesar de que ya el calendario marcaba la proximidad de la primavera canadiense, aun los termómetros nos decían que estábamos a -5 grados bajo cero.

El sitio elegido fue el popular Phoenix Concert Theatre en la 410 Sherbourne St, zona del centro de Toronto, cada año menos seguro por el incremento de drogadictos, agujas y vendedores de drogas que, aunque a diferencia de New York City, esta sería como un parque de diversiones, esperamos que ojala el City Hall de Toronto tomen medidas inmediatas para devolver la seguridad de años atrás.


Vamos a la música, la primera de las bandas que se presentaron estuvieron los DOOM metaleros de Summoner’s Circle quienes llegaron con sus túnicas negras desde Knoxville, Tennessee para tocarnos algunos temas de su álbum debut TOME (2018), su presentación fue impecable.

Luego aparecieron los finlandeses de Swallow the Sun con su característico death-doom metal, cada vez más pesado, diría que talvez más thrash death doom en escena, aunque con ya la marca registrada del sonido de Finlandia, se que los conocedores me entenderán. Ellos trajeron un repertorio de 7 temas entre los cuales se encontraban These Woods Breathe Evil, Upon the Water, Firelights, New Moon, Stone Wings, Deadly Nightshadey Swallow (Horror Pt. 1). La mayoría de los temas tocados pertenecen a su reciente trabajo When a Shadow Is Forced into the Light lanzado por Century Media hace poco tiempo en este año 2019. Realmente cada vez están más potentes.

La siguiente banda fue Wolfheart también de Finlandia y que nos traerían un super viaje pesado de oscuridad la cual me encanto, aunque su música no es para cualquier odio pues algunos espectadores, les resulto algo denso, pero es que Wolfheart, traspasa muros de concreto con la magnitud de su música. Un arte extremadamente complejo y apreciado por sus seguidores. La lista de canciones de Wolfheart fueron solo 6 pero que valían por 10. Estos fueron Everlasting Fall, Strength and Valor, Zero Gravity, Breakwater, The Hunt y Boneyard.

Así que luego de las 3 anteriores bandas llego el momento esperado de la noche, la cereza del pastel, el motivo principal del boleto, esto era Children Of Bodom encabezados por el flaco Alexi Laiho que, aunque sea pequeño, tiene un corazón gigante pues no baja su energía en ningún momento. Con el llegaron Jaska Raatikainen, Henkka T. Blacksmith, Janne Wirman y Daniel Freyberg para completar a los Bodom.

Los temas que tocaron fueron 14: Are You Dead Yet?, Under Grass and Clover, In Your Face, This Road, Bodom Beach Terror, Everytime I Die,
Platitudes and Barren Words, We're Not Gonna Fall, I Worship Chaos, Sixpounder, Angels Don’t Kill, ¡If You Want Peace... Prepare for War y un Encore con Hate Me! y Downfall. En todo el concierto hubo muchísimo moshpit, que hasta parecía un concierto de hardcore punk. La banda se enfoco en su gira de promoción del Hexed por estas tierras, álbum que es su nuevo lanzamiento de este año 2019 y es muy bueno.

El merchandising estuvo A1 de los Bodom, 30 dólares los T-shirts y 25 dólares los vinilos, más baratos que Amazon que pide unos 40 dólares, los parches a 10 dólares y una que otra cosa más, yo me compre un T-shirt de la gira y un parche.
Bueno después del concierto, comencé a salir, cosa difícil pues había muchísima gente, la mayoría de los residentes de Canadá son educados, aunque por allí siempre hay un idiota que hay que devolverle el empujón. Tome mi taxi hasta el bus terminal, provisione un par de gaseosas y un sándwich, previos “pufs” para mi asma, tome el ultimo bus para Kingston y recorrí mis 265 kilómetros de vuelta hasta llegar a ella y en el camino me puse mis audífonos para escuchar más Children of Bodom. Gino Alache.